Su tratamiento se inicia con una evaluación completa y abierta para lograr un concepto de tratamiento realista y sostenible, “el plan maestro” con el que todos podemos estar de acuerdo.
Antes del inicio del procedimiento nos sentamos y repasamos los fundamentos de su plan de consulta para asegurar que todos entendemos los objetivos del procedimiento.
El cabello de la zona donante se extrae con anestesia local, el cierre se realiza con una sutura o grapas. Ningún dolor debe ser sentido durante este proceso y muchos pacientes no se dan cuenta que cuándo ha sucedido.
El pelo trasplantado se divide, se limpia y se comprueba por el equipo técnico. Esto se lleva a cabo bajo los microscopios para garantizar la mayor calidad y el cuidado de las unidades foliculares.
A continuación, se separan en sus pertinentes agrupaciones naturales de unidades foliculares de 1, 2, 3 y 4 pelos, y se mantienen en una solución de retención para mantener su óptima calidad.
Mientras que se están preparando los injertos para la zona receptora, utilizamos las hojas a medida para realizar las incisiones de colocación de los injertos. Esto limita el tiempo que los injertos están fuera de su entorno y mantienen su calidad.
Las cuchillas a medida aseguran que cada incisión se adapta al tamaño del injerto. Hace que la cicatrización sea más rápida y con una mayor precisión.
Las unidades foliculares/injertos se colocan en la zona receptora, a veces con tres técnicos trabajando al mismo tiempo para garantizar la máxima eficiencia. Puede ser un día largo y queremos asegurar su bienestar y comodidad, que es lo más importante.
Una vez terminado el procedimiento se aplica un ligero aderezo para la noche, para que usted sea capaz de tener un aspecto discreto. Usted recibirá instrucciones por escrito y medicamentos después de la operación, para hacer más cómodas las primeras noches.
Esperamos que su día sea lo más cómodo posible y trabajaremos porque así sea.
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